
Viniendo de una familia de artistas, soñaba con hacer música, que comencé a los 7 años. Cuando era adolescente, me dediqué de forma natural a la parte técnica y pude combinar la música y el sonido.
Empecé mi carrera en la industria audiovisual después de graduarme como ingeniero de sonido en Barcelona y me trasladé a París para empezar a trabajar en diferentes estudios de doblaje, salas de conciertos y otros eventos.
Volví a Barcelona para seguir doblando, todavía detrás de la consola.
Tras varios años combinando la parte artística y la técnica del doblaje y la locución, me di cuenta de que tenía cierta sensibilidad para la interpretación, por lo que me propusieron probar con la dirección de voz y de escena, de la que ahora tengo casi un centenar.
Poco a poco, me llamaron de otros estudios para diversos proyectos de doblaje, voces corporativas, documentales, publicidad, etc. Me lancé al trabajo de locución.
Tengo un estudio profesional en el que grabo a diario para varios clientes de todo el mundo.
